Deutsche Telekom registró un beneficio neto atribuido de 4.070 millones de euros en el primer semestre del año, una reducción del 75,91% en comparación con los 16.899 millones de euros del mismo periodo del curso anterior que se debe a la ausencia de los impactos extraordinarios que se reflejaron en las cuentas de la compañía en la primera mitad del ejercicio pasado debido a la venta del 51% de su filial de torres en Alemania y Austria.
De este modo, el beneficio neto ajustado de la compañía entre enero y junio de 2024 se situó en 4.716 millones de euros, un 22,62% más que los 3.846 millones de euros del primer semestre de 2023, según las cuentas presentadas por la teleco germana este jueves.
Asimismo, los ingresos netos de Deutsche Telekom en la primera mitad del curso alcanzaron los 56.337 millones de euros, es decir, un 2,3% más que los 55.060 millones de euros del mismo periodo del año anterior.
En tanto, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de Deutsche Telekom se situó en 23.736 millones de euros, un 32,4% menos que los 35.122 millones de euros registrados entre enero y junio del ejercicio precedente.
Sin embargo, el Ebitda ajustado fue de 24.469 millones de euros, un 5,8% más que los 23.318 millones de euros del primer semestre de 2023.
Por su parte, el beneficio neto de explotación (Ebit) terminó la primera mitad del año en 11.666 millones de euros, lo que representa una caída interanual de casi el 50% en comparación con los 23.222 millones de euros registrados al cierre de junio de 2023.
De este modo, el margen Ebitda de Deutsche Telekom terminó el primer semestre en el 41,49%, frente al 63,78% del mismo periodo del curso previo, mientras que el margen Ebitda ajustado fue del 43,43%, en comparación con el 42,02% registrado al cierre de junio del año pasado.
Asimismo, el margen Ebit fue del 20,7%, cuando en el mismo periodo del ejercicio precedente fue del 42,17%.
«Todas nuestras operaciones están funcionando bien. Trimestre tras trimestre, estamos viendo cómo nuestra estrategia da sus frutos», ha destacado el consejero delegado de Deutsche Telekom, Tim Höttges.