La consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) ha sido multada en China con 441 millones de yuanes (56,1 millones de euros) y deberá cesar las operaciones de su filial en el país durante seis meses por las deficiencias al auditar las cuentas de la inmobiliaria quebrada Evergrande.
La medida, la más dura adoptada por Pekín contra una de las ‘Big Four’, llega después de que la Comisión Reguladora de Valores de China constatase en marzo que PwC China había dado su visto bueno a los resultados de Evergrande, a pesar de que la promotora había inflado sus ingresos en China en casi 80.000 millones de dólares (72.144 millones de euros) en los dos años anteriores a su colapso en 2021.
Evergrande fue declarada el pasado enero en proceso de liquidación por un tribunal de Hong Kong tras acumular un pasivo de más de 300.000 millones de dólares (270.538 millones de euros).
De esta forma, la sanción supera el pago de 31 millones de dólares (28 millones de euros) y la prohibición parcial de actividad de tres meses impuestos a Deloitte en 2023 por los «graves fallos de auditoría» con China Huarong Asset Management.